EL ARCA DE NUESTRA FE, NO REQUIERE TIMON
1. Le especificó la madera para ello, esto fue madera de gofer
2. Harás aposentos y compartimientos en el arca, esto es secciones o habitaciones
3. Tendría que calafatearla con brea, por dentro y por fuera
4. Especificó la longitud, 300 codos (136 Mts de eslora)
5. Especificó el ancho, 50 codos (22.8 Mts de manga)
6. Especificó la altura, 30 codos (13.6 Mts de puntal)
7. Una ventana, que se extienda alrededor de la circunferencia del arca, a un codo de la parte superior del arca, tal abertura proporcionaría suficiente luz y ventilación, alta, para que no entrara el agua a la barca. Una sola puerta a un lado de la barca.
8.- Harás tres pisos
Sorprendente dimensiones
El Museo Naval de Ferrol (Galicia, España). Publicó un interesante artículo acerca del Arca de Noé como nave. En primer lugar, dice, se podría considerar que el encargo del arca supuso la primera “especificación de contrato” de la construcción naval de toda la historia, en la que Dios representó al armador y Noé a la factoría.
Pero lo realmente increíble tiene que ver con sus medidas. En el relato de Génesis, Dios indicó cuáles debían ser las dimensiones del arca. Por lo tanto, explica el Museo, si tenemos en cuenta que el codo mencionado en la Biblia era la distancia media en un adulto entre el codo y el extremo de la punta de los dedos (45,6 cm). Resulta destacable, aclara el Museo Naval, que esas relaciones de eslora, manga y puntal utilizadas en la construcción del arca, son típicas de la construcción naval de los años 70, adelantándose así más de dos mil años el diseño del arca de Noé a la construcción naval moderna.
Pero las coincidencias no acaban aquí. Otro dato igual o más sorprendente que han encontrado
Es que si se examina el pasaje de la Biblia en cuestión, se puede observar que a Noé también se le encargó una brusca, la curvatura transversal de la cubierta superior, de un codo de altura.
E increíblemente, resaltan, esta medida también coincide con la brusca estándar de los años 70, que se obtenía del cociente de manga/50, que en este caso correspondía a una dimensión de 0,456 metros.
Dios le especificó absolutamente todos los detalles, nada quedó para ser análisis, conjeturas.
Al seguir el plano dado por el Todopoderoso Dios, el Arquitecto de nuestras vidas, de nuestras almas; el producto, el resultado no pudo ser o no podía ser ningún otro excepto lo que Dios le asigno hacer.
Los planos, los diagramas, las coordenadas recibidas del Señor solo pueden dar un resultado, glorificarlo a Él.
El arca o la nave no tenía que ponerse a prueba:
1. Para ver si navegaría
2. Para ver si resistiría las inclemencias
3. Para ver si habría que hacerle algún ajuste.
Cuando Dios da instrucciones para nuestras vidas, no es una posibilidad, no es un veremos. El Señor sabe las inclemencias que vamos a atravesar y todas sus instrucciones es para que salgamos triunfantes a través de cuanto se nos presente.
A Noé se le confió la construcción del arca, pero él solo siguió instrucciones. El cual resulta sumamente difícil para nosotros, como si pudiésemos superar o afianzar, mejorar lo que ya fue establecido por el Señor.
Toda instrucción del Señor es para que podamos navegar en mar abierto. Y todo está a prueba de accidentes. Cuando seguimos las instrucciones, lo establecido, lo diseñado por Él; llegaremos a puerto seguro.
La nave o el arca no tenía un timón, un control de navegación humano, pero si un control enteramente divino. El puerto de arribo, el curso del barco, Él Capitán de aquella arca era Jehová, el GRAN YO SOY.
Naufragio, imposible; colisión, imposible. Todo cuanto se ejecute según determina e instruye el Señor, no puede sino solo ser éxito.
Axioma: Obediencia a Dios no necesita un timón, solo dependencia y completa confianza. Control absoluto para nuestro Santo Rey, ya que jamás hay desastres en sus manos.
Dios entregó los planos a todo creyente, solo tenemos que construir, basado en cada detalle que nos ha presentado.
Algo admirable de Noé, fue el hecho que él no trató de tener el control en nada, no alteró ni una coma y al entrar al arca su fe declaró completa dependencia y obediencia al Supremo.
Normalmente en nuestras vidas cuando no tenemos control. O cuando nos vemos privados de poder dirigir, nos sentimos impotentes. Pero ciertamente todos los creyentes debemos y tenemos que entender que cuando el Señor espera que depositemos en Él nuestra confianza. Es igual a instruirnos, construye el arca de fe en base a mi plano y yo te conduciré a puerto seguro.
¿Qué si Noé hubiese optado por alterar las especificaciones, y si hubiese tratado de añadir o excluir algún detalle? ¿Qué si hubiese decidido hacer algo a su manera? Ciertamente Noé no fue y no permitió que se levantaran consideraciones o dudas con respecto a lo instruido por el Señor, pero tristemente no ha sido y no es así en muchas de nuestras vidas.
La prueba de FE de Noé, no fue construir el arca, fue construirla sin TIMÓN.
No iba poder dirigirla, no iba a poder controlarla.
¡Suelta el timón!
¡Suelta el TIMÓN!
Ciertamente tenemos que navegar en este mar de confusiones y voces llenas de muerte, mar de pecado; y el Señor nos ha instruido, ha dado los planos para construir sobre nuestra fe y para entrar en el arca que nos permitirá navegar; el arca es un prototipo se Cristo, Cristo fue quien cerró la puerta del arca porque solo Cristo abre y cierra puertas, por eso el arca no tiene timón, por que ha Cristo no lo puedes controlar, Ud no puede controlar a Cristo, y en Él no hay naufragios, peligro. Siempre se llegará al puerto determinado y preparado por el Señor para los suyos, para que puedan desembarcar en el lugar de bien.
En aquella Arca, bendición total, ninguna necesidad, seguridad absoluta y descanso en Èl.
Quieres superar esta prueba que estás pasando? Suelta el timón
Quieres pagar esa deuda, quieres lograr ese negocio, quieres curarte de esa enfermedad, quieres que la prueba que estas pasando termine y se resuelva?
Suelta el Timón!!!
Deja que él dirija,
Deja que él conduzca,
Deja que el haga……
El Capitán de nuestras vidas se llama. C R I S T O
31 DE AGOSTO 2022